martes, 6 de marzo de 2012

Cuando me tropiezo con el canto de tu recuerdo...



>Subject: estado de ánimo (estado de excepción)
>Date: Thu, 30 Mar 2*** 01:40:07 +0200 (Hora estándar romance)

Te juro que no lo busco, ni siquiera lo disfruto. Palabra. Pensarte es como despertar con una sensación amarga en la garganta, y volver a dormir y querer sumergirte de nuevo en ello, cosiendo bajo los parpados otros mundos. Cómo colarte entre bastidores en un espectáculo de magia, solo para comprobar que imaginar es mejor que ver... (a veces). 
Hoy me tropecé con el canto de tu recuerdo al despertar y siguiendo con el pésimo símil, tuve que agarrarme la espinilla  mientras maldecía a viva voz en la penumbra de mi habitación. 
No guardé emails de ti, ni fotos, ni canciones... si me apuras, hasta los recuerdos están prostituidos, pero eso, me temo, no juega a mi favor...  mas, por lo visto, algo me hizo arrinconar en el fondo de un DVD ajado un email tuyo con fecha del 30 de marzo de 2***... Ufff!!! La de tiempo desde entonces que he consumido en forma de música, poesía, besos, risas, lágrimas y demás... la de veces que me he arrepentido de ti para volver, segundos después, esta especie de adicción vampirica a tu ausencia. "La de agua que ha pasado bajo el puente",  parafraseando a Bogart. No se debería guardar nada de momentos felices, ¿no crees? Deberíamos arrojar al sumidero del tiempo todo rastro de "ahoras" pasados. Pero eso sería darte la razón sobre trenes y momentos y bueno... sigo sin ser fácil de domesticar. 
Fue increíble leerte, como si 6 años fueran una décima de segundo. Cómo si en un suspiro cupiese el jodido universo entero. Qué fácil fue recordar, abrir las compuertas... y dejarme llevar por esa etimología propia y pluscuamperfecta que siempre cultivamos. 
Me sorprendí sonriendo al  monitor, escuchando tu voz. Alto y claro, como cuando en aquellas noches rompías el silencio que nuestras manos imponían y asomados al valle jugábamos al "tú la llevas" con el deseo. ¿De verdad nunca echas de menos aquello? ¿En serio jamás piensas que debimos haberlo intentado? ¿Que fue genial todo, incluso ciertos momentos de, digamos, vergonzosa ausencia?...  
¿Por qué sigo queriéndote con semejante falta de practicidad? ¿Cómo es posible siquiera eso si amar se conjuga exclusivamente en presente? No lo sé... Pero siento que es así a cada paso que doy. No hay un solo día en que no me muestre convencido a mí mismo de que tú fuiste, a pesar de todo, una excelente elección para alejar los fantasmas de los análisis y los TACs... pero sobre todo para recuperar las ganas de querer volar acompañado. 
Me jode mucho saber que las palabras son mis pociones y que contigo da igual el empeño que ponga en conmoverte... la tarea es inversamente proporcional al cuadrado del esfuerzo y me convierto en un viento tan estéril que no consigue ni agitarte un insignificante segundo.  Me produce mucha rabia saber que moriré sin volver a verte y que para rozar el patetismo, serás lo último en lo que piense...
Pero si yo solo quiero saber que sigues viva de vez en cuando... tomar una de nuestras (tuyas) míticas cervezas mientras cae la tarde y el mundo se esfuma tras los cristales del bar. Si no quiero nada que no sea saber que existes y que además, a veces, eres.


2 comentarios:

  1. me maravilla cómo haces de un momento una dia de 6 años...
    qué grato es leerte.

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  2. Gracias pero, últimamente se me dan mejor los hechos que las palabras... when u wish... besos, majo-sama.

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